El té de las cinco
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No es solo té, es el momento,
el ritual, la ceremonia del tiempo. Calentar la tetera con el agua hirviendo; eliminar el agua, las hojas de té van cayendo.
Estas se abren, la humedad absorben,
la tetera las mima sin agua que estorbe.
Mientras ella las mima el agua hierve, que después de un minuto
volverá a la tetera a esperar su fruto.
El té y el agua necesitan tiempo para conocerse;
es la tierna espera, entrañable reposo para complacerse.
Ahora, en la entrega, tú y yo charlamos,
y serenamente la tarde colmamos.
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© rosama (Batiburrillo y batahola)
Tienes un premio en mi blog para tí. Besos
ResponderEliminarJo, no me lo puedo creer... si casi no existo... tengo 9 seguidores... jeje Muchísimas gracias!!!
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